
La forma en que se ha procesado esta propuesta es profundamente deficiente y peligrosa para la vida institucional del Estado: Emma Álvarez
* La justicia no puede depender del capricho de la coyuntura política ni de la voluntad de una mayoría parlamentaria temporal
“Nuestro voto en contra no es un acto de obstrucción, sino de responsabilidad. Decimos no, porque queremos que cualquier reforma al Poder Judicial se construya con diálogo, con participación, con transparencia y con el tiempo necesario para hacerla bien. A la ciudadanía le decimos: no estamos aquí para ser espectadores de decisiones apresuradas, sino para defender el Estado de Derecho, el equilibrio de poderes y la certeza jurídica que ustedes merecen”, sentenció la diputada Emma Álvarez Villavicencio, al rechazar la propuesta de decreto para expedir la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado de México, a nombre de la fracción parlamentaria de Acción Nacional.
Durante el Cuarto periodo extraordinario de la LXII Legislatura, precisó que de manera apresurada, se pretende aprobar un dictamen sin la reflexión necesaria, sin el contraste de ideas y sin el mínimo de diálogo que una democracia exige. Cuando se legisla de esta manera, aseguró, se tiene como resultado inevitable leyes débiles, ambiguas, y con alta probabilidad de generar conflictos jurídicos y operativos.
Álvarez Villavicencio señaló que su partido lo ha dicho antes y lo reafirma,“las reformas que tocan la médula de nuestras instituciones requieren de un proceso legislativo amplio, incluyente y técnicamente riguroso”, por lo que es inaceptable que no se hayan considerado y convocado a juristas, académicos, colegios de abogados, barras de litigantes y representantes del propio Poder Judicial para escuchar su experiencia y conocimiento.
Precisó que el dictamen presentado contiene contradicciones internas, ambigüedades y vacíos que abrirán la puerta a interpretaciones discrecionales. La justicia, aseveró, no puede depender del capricho de la coyuntura política ni de la voluntad de una mayoría parlamentaria temporal.
Agregó que AN siempre ha defendido que la justicia sea pronta, completa e imparcial, además de creer en el modelo de administración pública basado en la eficiencia, profesionalización y el servicio a la persona humana. Por lo que rechaza cualquier intento de politizar la justicia, subordinarla a intereses partidistas o reducirla a una maquinaria electoral.
Puntualizó que la independencia judicial es una garantía para cada ciudadano, ya que cuando un juez o magistrado puede decidir sin presiones políticas, gana la sociedad entera.