
Autoridades educativas deberán contar desde el próximo ciclo escolar con un protocolo para atender casos de bullying
•Fortalece el Congreso mexiquense acceso a los derechos sociales.
De manera unánime, el Pleno de la LXI Legislaturaaprobó la iniciativa del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (GPPRI), encabezado por el Diputado Elías Rescala Jiménez, para atender y sancionar el acoso escolar en instituciones educativas, públicas y privadas, así como en redes sociales.
Se establece que en los casos de acoso escolar o bullying, él o la acosadora garantice la reparación del daño moral y una indemnización o el pago de daños y perjuicios.
La propuesta presentada en tribuna por la Diputada Paola Jiménez Hernández establece lineamientos para la atención y seguimiento de casos de bullying en las aulas y cuando se realice a través de cualquier red social, aplicación o plataforma electrónica.
Lo anterior como parte de las reformas a la Ley para Prevenir y Atender el Acoso Escolar estatal por las que se faculta a la Secretaría de Educación de la entidad a que elabore y expida el protocolo de actuación aplicable ante los actos de bullying en el ambiente escolar, así como su revisión y actualización anual. Este protocolo deberá estar listo para su aplicación a partir del próximo ciclo escolar.
En sesión plenaria, la legisladora priista explicó que los integrantes de las Comisiones Legislativas de Procuración y Administración de Justicia, y de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología coincidieron en el gran reto que significa la atención de este flagelo, pues llega a ocasionar la pérdida de vidas de las personas que son sometidas a este tipo de maltrato físico y emocional.
Los conflictos -dijo- se traducen en acoso escolar cuando existe intención de agredir a la víctima de manera constante; el agresor no presenta sentimientos de compasión por la víctima; y es evidente una desigualdad entre el agresor y la víctima, por ejemplo diferencia de edad, estatura o popularidad.
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Hernández Jiménez detalló que el acoso escolar ocasiona serios daños en las víctimas, como son, el aislamiento social, marginación de la víctima, desprecio, faltas de respeto, distorsionar la imagen social del niño o niña, coacción, intimidación y amenazas.
Por lo que se debe apoyar a las niñas, niños y adolescentes, así como al cuerpo de profesores y personal administrativo de las instituciones escolares con la creación o fortalecimiento de protocolos de actuación para atender estas prácticas, promocionar programas y campañas de prevención e intervención, para detectar y actuar frente a casos de bullying.