Excelente noticia para una especie en serio peligro de extinción
Los animalistas del mundo y los ambientalistas celebraron hoy el nacimiento de un bebé rinoceronte negro en un zoológico de países bajos. Es el tercer rinoceronte que nace en el zoológico de Rotterdam y aunque ya es muy amado, aún no puede ser visitado debido a las restricciones por Coronavirus.
Esta especie está críticamente en peligro de extinción debido a la caza furtiva para surtir de cuernos a Oriente Medio, donde se emplean para hacer el mango de dagas ceremoniales y para la medicina tradicional asiática.
Un poco de historia
En el año de 1973 se aplicó el tratado de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres, más conocida como (CITES) por sus siglas en inglés, con base a la resolución adoptada por los miembros de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, cuyo propósito es el de asegurar el comercio internacional de animales y plantas salvajes no amenace su supervivencia en su medio natural. Aún así la caza furtiva continúa hasta nuestros días.
En 2011 la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza declaró oficialmente la extinción de la subespecie de rinoceronte negro Diceros bicornis longipes.
La caza de rinoceronte ha sido un deporte demandado por las élites de algunos países desarrollados, entre los cazadores más famosos se encuentra el expresidente estadounidense Theodore Roosevelt.
En un reportaje de National Geografic sobre este hermoso ejemplar, señala que la población mundial de rinoceronte negro africano (Diceros bicornis) se concentra en ambos extremos del sur de África y, según las cifras de 2018, tan solo quedan 5.630 ejemplares con vida en el planeta para asegurar la supervivencia de la especie.
Pese a lo alarmante de los datos, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) ha asegurado que la población de estos grandes mamíferos está creciendo paulatinamente cada año. Lo hace muy tímidamente, en torno a un 2.5% anual, pero suficiente como para suponer una gran noticia para la especie tras ser objetivo durante décadas de la caza furtiva y el comercio ilegal.
