Pruebas rápidas: falta de dinero o de conciencia

Comunicación XXI
19.01.22 11:25 PM Comentario(s)

Ana Liza en línea

Por Mariel Álvarez Sánchez

Definitivamente ómicron ha puesto en jaque al México y al Edomex. Los contagios rompen récord a diario y, al parecer, no hay dinero o conciencia, para hacer pruebas rápidas y gratuitas para aislar y romper la cadena de contagios.


A muchos les puede parecer que, para un trabajador promedio, pagar 250 pesos en el mejor de los casos para hacerse una prueba rápida, es poco dinero; pero no lo es. Es un gasto oneroso, con el que seguramente come, hasta dos días, una familia con un salario mínimo.


A los patrones se les hace fácil pedir una prueba -negativa o positiva- para poder volver a trabajar o bien, para no ir a trabajar por estar enfermo de Covid; y mientras tanto, no hay módulos de pruebas gratuitas; los laboratorios privados y farmacias hacen su agosto con la aplicación de las mismas, a supuesto “bajo costo”. Pero ¿Bajo costo para quién? Para el patrón, claro está.


Tan no es bajo costo para los trabajadores, que prefieren levantarse en la madrugada para hacer una fila eterna, bajo el sol y con síntomas de malestar, por horas, para poder acceder a esa prueba rápida y gratis.


Fue un gran acierto del alcalde de Metepec, Fernando Flores y su cabildo, haber adquirido 12 mil pruebas rápidas para aplicar a los habitantes de ese municipio.


Las supuestas pruebas gratuitas que se hacen en los hospitales Covid, ya no se hacen; incluso decidieron dar incapacidades en línea y confiar en la buena fe del trabajador. “Si hay síntomas, demos por hecho que tenemos Covid” señalan funcionarios del sector Salud.


Primero lo hizo el IMSS al anunciar que se puede tramitar la incapacidad vía internet de 5 hasta 7 días, sólo por tener síntomas, aunque no sean graves.


Hoy lo anunció también el ISSEMYM en el Estado de México; pero este nada tonto; para ahorrarse las pruebas, bien dadivoso, dará las incapacidades vía electrónica A LOS QUE CUENTEN CON RESULTADOS POSITIVOS.


Ante este panorama, muchos patrones no aceptan las incapacidades y hay cierta presión en contra de los trabajadores. En tanto los centros del sector Salud que deben aplicar pruebas, ya ni lo hacen, lo digo por experiencia propia, sólo te recetan y te dan incapacidad. Eso es todo.


Ojalá y todos los municipios hicieran sus propias campañas de pruebas gratuitas. Estoy convencida de que la certeza de estar contagiados, los llevaría al aislamiento y a romper las cadenas de contagio; aunque indudablemente es un gasto cuantioso.


Aunque les dan precio especial; por ejemplo, en el caso de Metepec, cada prueba tiene un costo promedio de 166.66 pesos; pues se gastaron dos millones de pesos en 12 mil pruebas.


Cabe señalar que el sector empresarial también se ha sumado a esta acción de comprar y aplicar pruebas gratuitas a sus trabajadores para evitar un problema ´más grande y, cabe decirlo, ante la nula respuesta por parte de las autoridades estatales y federales.


Podría decirse que esta es una obligación del sector salud federal y estatal; pero al parecer ya han sido rebasados y pues como diría el presidente Andrés Manuel López Obrador y el responsable del programa de manejo de la pandemia en México, Hugo López Gatell; a cuidarnos con Vick VapoRub y a portarnos bien para que no nos dé Covid.


*Las personas debemos cumplir nuestra parte


Las personas también tenemos que hacer lo que nos corresponde; no es posible que, a casi dos años de pandemia, aún haya gente que no cree en las vacunas, que se las llevan casi hasta su casa y no se la ponen, o porque no creen en ella, o porque no les gusta la marca que les tocó.


Además, andan por la calle sin cubrebocas y sin respetar ningún protocolo de sanidad. A dos años, deberíamos estar educados para poder convivir con el coronavirus sin ponernos y poner a los demás, en riesgo.


El tema da para tanto que el espacio resulta poco, pero los dejo pidiéndoles que seamos responsables de lo que está pasando y cumplamos con nuestra parte.